Anexo esta breve pero interesante entrevista con Jose Roca publicada en El Tiempo. Sin tanto aspaviento, define el lugar y la función del curador, la comercialización de las bienales y se refiere al «descubrimiento» del arte contempráneo colombiano. Aunque se entiende que por sus múltiples ocupaciones tiene poco tiempo para dedicarle a su Columna de Arena, sólo quedaría decir que sería interesante reactivar este espacio, asi fuera con un artículo bimensual.
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José Ignacio Roca, un curador colombiano más allá del arte nacional
Pocos como él en Colombia han tenido la oportunidad de ser jurado de la Bienal de Venecia, una de las más reconocidas del mundo. Actualmente, Roca se desempeña como curador del Museo de la República. Para entender lo afinado que tiene el ojo el curador José Ignacio Roca podría decirse que estudió en el Museo Whitney de Nueva York (E.U.) y que ganó la beca del Instituto de Arte Contemporáneo de la Universidad de Pensilvania, en Filadelfia, así como la que entrega la American Center Foundation a los nuevos talentos de este oficio.
¿Qué tipo de temperamento se necesita para ser curador?
Solo se necesita tener claro que uno existe debido a los artistas y no al revés.
¿Por qué alguna vez dijo que la curaduría es como hacer ficción?
Porque se crea un argumento, de cierto modo arbitrario: uno pone en escena, como decía Harald Szeemann, sus propias obsesiones. Concebir el guión de una exposición es análogo a hacer el guión de una película. Una exposición es un ensayo visual que se da por la interacción entre las obras, el público y el espacio que los contiene.
¿Algún día el arte será realmente popular o definitivamente es un fenómeno de élite?
El arte contemporáneo puede ser difícil y hasta críptico, y no es haciéndolo más digerible -lo que los gringos llaman ‘dumb down’- como se logrará interesar al público. La función de todo museo es educar la mirada. La misma actitud conservadora que ahora reclama más Picassos y más Monets en los museos es la que hace cien años criticaba el cubismo y el expresionismo como deformaciones de los cánones clásicos.
¿Qué diferencias hay entre ferias y bienales?
Se ha escrito mucho sobre la ‘ferialización de las bienales’ y la ‘bienalización de las ferias’, en referencia a que hace unos años las ferias empezaron a tener seminarios y secciones curadas como una forma de darse credibilidad. Y ahora, con los recursos que manejan, pueden tener programas de producción de obra nueva que ningún museo o bienal puede permitirse.
Inversamente, muchas bienales privilegian el arte comercial e incluyen artistas cuya participación es financiada por una galería, con lo cual el espacio para un arte más difícil, más especulativo si se quiere, se está cerrando.
Además de ser la más antigua, ¿por qué es tan importante Venecia y qué caracteriza a esta Bienal?
La Bienal de Venecia es la creadora del modelo de bienal de arte -herencia de las exposiciones universales, en las que cada país mostraba su poderío-, un espacio en que se mide y compara la producción simbólica.
Venecia es la madre de estos eventos artísticos globales -con todos sus vicios y problemas- y como toda madre hay que quererla. Pero no creo que sea más importante, desde el punto de vista de la curaduría, que la Documenta, la Bienal de Sao Paulo o la Manifesta (la bienal itinerante europea).
¿Qué es lo más importante que le ha pasado al arte nacional durante las dos últimas décadas?
Debido al aislamiento relativo del país, no era un destino a donde curadores y críticos desearan viajar. Esto redundó en que los artistas locales desarrollaron un trabajo sólido sin las presiones del mercado o el imperativo de acceder al circuito internacional. Los últimos años ha habido un descubrimiento del arte contemporáneo colombiano.
Por Margarita Posada
Especial para El Tiempo
http://www.eltiempo.com/cultura/2007-11-10/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR-3809187.html