Uno de los aportes más relevantes del artículo ¿Quieres ser un curador de arte? es el señalamiento que hace sobre la profesionalización del campo artístico. Profesionalización que, a nivel local, se ha dado principalmente en la formación de artistas y, actualmente, gestores, museólogos y curadores.
Viene la pregunta: si en todas las convocatorias para artistas se exige una formación profesional, ¿cuando va a suceder los mismo para nombrar las personas que, supuestamente, se van a dedicar a generar investigación en los museos y centros de arte? (por ahí circuló un documento de Buenas Prácticas en Museos e Instituciones Públicas).
Es cierto que poco a poco le da la oportunidad a jóvenes investigadores (como a Sylvia Suarez, con muy buenos resultados) Y eso está muy bien pero, por poner un ejemplo, ¿qué hubiese sucedido si la antológica de Miguel Angel Rojas estuviese a cargo de un equipo curatorial dirigido por Natalia Gutierrez, quien ha venido escribiendo e investigando sobre la obra de Rojas desde hace años?
Por otra parte, en el caso de que la BLAA no cuente con un equipo de investigación propio y consolidado (cuenta, eso sí, con un Jefe de Exposiciones muy calificado, pero él solo no puede estar a cargo de casi todo) una de las mejores formas de ganar espacio a unas directivas conservadoras es fundamentar su programa de exposiciones a partir de las líneas de investigación que defina su team curatorial.
Ahora, si la idea es delegar a investigadores externos ¿porqué no abrir una convocatoria para proyectos curatoriales? (Eso sería una buena forma de abrir la institución a otras miradas y, lo que es más importante, otras investigaciones)
A instituciones públicas como el Ministerio de Cultura, la Alzate y la Santafé les ha ido bien con esta modalidad. Con esto se evita el problema de tener a los curadores dedicados únicamente a la gestión y, a largo plazo, llevar la institución a convertirse más en productora de eventos, dejando a un lado la investigación (como sucedió con el Museo de Arte Moderno, por estos días muy ocupado pensando en la construcción de su nueva sede!!).
En resumen, muy buenas instalaciones, indicadores de asistencia, programa amplio de exposiciones pero, ya que se ha hecho tanto, ¿por qué no ponerse al día y profesionalizar la investigación museológica y curatorial? (excelente la nota de El Tiempo donde se se habla de los 800.000 asistentes en un año, indicador que por si sólo es fundamento para consolidar un espacio de investigación curatorial sólido y heterogéneo).
Es cierto que en el caso de los salones regionales hasta ahora se está implementando el modelo de proyectos curatoriales que, por cierto, es urgente apoyar con presupuesto para la difusión (de ahí que se diga que los actuales salones son prácticamente invisibles, por decir lo menos)
La propuesta curatorial «El Espejo: ni sí, ni no..» a cargo de Claudia Salamanca y Andrés Gaitán se acaba de abrir en el Museo de la Universidad Nacional (habrá que ir). En cuanto a Transmisiones, el proyecto curatorial de María Clara Bernal (remember «Displaced») y Fernando Escobar, tiene sus razones para ser invisible, pues gira en torno a transmisiones de radio, emisiones variopintas y publicaciones.
Aún así ¿alguien del medio artístico ha escuchado alguna de estas transmisiones? Si, claro está que en las montañas de alguna región de Boyacá se emitieron algunos programas pero, ahora que vienen a Bogotá ¿donde y cómo escucharlos? (lo pregunto pues tratándose de un proyecto de «transmisión» y «comunicacíón» no está muy claro si es entre el «parche» de los curadores y sus artistas o entre ellos y algunos miembros del altiplano cundiboyacense)
Como dicen los del gremio de la radio: déjense oir!
Quedamos QAP.
Catalina Vaughan
4 comentarios
¡Se buscan exposiciones!
Ver en:
http://www.lablaa.org/expotemp-convoca.htm
Esa convocatoria nace más un formalismo, que de una voluntad institucional. Es decir, como la BLAA es una institución pública «debe» estar abierta a que personas ajenas a la institución (artistas, curadores) hagan sus propuestas. Igualmente, se puede arguir que la convocatoria se hizo «pública» porque se publicó en la página de la BLAA.
Por ejemplo, hace más de una década, en el entonces llamado IDCT, quien quisiera exponer tambien debía seguir un trámite similar y, de pronto, lograba que un comité aprobara su proyecto curatorial o le diera el espacio para exponer. Luego vinieron las convocatorias, que expresaron el carácter público del IDCT. Lo mismo con el Ministerio de Cultura y otras instituciones públicas.
A lo que me refiero es a que en la BLAA se diseñe un programa de convocatorias (como lo ha hecho Mincultura y la Secretaría de Cultura) que no sólo refleje una voluntad institucional de acoger y estimular la investigación y la creación, sino que se articule dentro de las líneas de investigación propias de la BLAA (curaduría histórica, de arte contemporáneo, etc).
Para cerrar, hace tres años era posible que en la Universidad de los Andes (una entidad privada) le publicaran a un proponente un texto crítico. Pero ahora, con el Premio de Crítica, esa voluntad toma forma.
Es eso. No más.
Un dato para la amplia minoría: Para escuchar lo de Transmisiones vaya a esta dirección:
http://transmisiones.org/
¿Quisiera preguntarle a José Roca cuales proyectos se han aprobado de los que se han presentado en los últimos años para las salas del tercer piso de la biblioteca Luis Angel Arango? ¿Alguno de pintura por casualidad?
Lo digo porque por lo general las salas de la Luis Angel permanecen cerradas. Yo creo que los mismos artistas podrían financiar las exposiciones si es cuestión de presupuesto, y no dejar el espacio cerrado sin mayor movimiento.
Sobretodo porque propuestas y artistas es lo que estan sobrando y espacios hay pocos.
Envío link de entrevista sobre el Museo de Arte Contemporáneo y el medio artístico de Lima, Peru.
Cualquier parecido con la realidad artística colombiana es pura coincidencia:
Alfredo Vanini y El Museo de Arte Contemporáneo
Cargado por henryspencerxxx
Juan Molano
Antropólogo visual