Precisamente yo estudio y vivo en Barcelona con una de esas becas. Y esto no es simple propaganda porque estoy becado y llevo el programa, todo lo contrario, me queda claro la dirección política y la pelea que el PEI está intentando. Y no me parece empresa fácil en un sistema del arte global donde la explosión burocratizante de cargos -baste solo ver la profusión de programas de estudios curatoriales en el mundo- es la que impone la pauta despolitizada y acrítica de gran parte de los discursos transnacionales.
Las inscripciones son hasta el 2 de octubre. De los profesores permanentes e invitados quizá no quepa decir mucho, sino tan solo señalar que se trata de singularidades que desde sus distintos campos vienen librando varias de las batallas críticas más significativas a nivel político en años recientes (baste mencionar a Douglas Crimp, Judith Butler, Jacques Rancière, Ana Longoni, Suely Rolnik, Allan Sekula, Chantal Mouffe, Beatriz Preciado, entre otros).
Reproduzco la presentación del programa y la información completa se puede ver aquí. Realmente recomiendo echar una mirada.
……
Programa de Estudios Independientes (PEI) 2010-2011
Con la participación de Xavier Antich, Manuel Asensi, Rosi Braidotti, Judith Butler, Douglas Crimp, Marcelo Expósito, David Harvey, Ana Longoni, Rita McBride, Chantal Mouffe, Francesc Muñoz, Beatriz Preciado, Jacques Rancière, John Rajchman, Emmanuel Rodríguez, Suely Rolnik y Allan Sekula, entre otros.
El Programa de Estudios Independientes (PEI) tiene como objetivo desarrollar una reflexión en el campo de las prácticas artísticas que vinculan el arte a las ciencias humanas y a la intervención crítico-social. En consonancia con este objetivo, trata de incentivar y formar en los estudiantes una actitud y unas habilidades en el ámbito profesional, que se fundamentan en una posición crítica respecto al arte y la cultura. Partiendo de una concepción del hecho artístico como producción en la que confluyen distintos sistemas, campos sociales y saberes (crítica del discurso, estudios de género, nuevos movimientos sociales, economía, crítica de las terapias, etc.), aspira a estimular la capacidad de cuestionar el marco establecido por la tecnocracia neoliberal.
De ahí que el PEI persiga una repolitización de la pedagogía, que ha llegado a convertirse en agente marginal e inocuo por esa misma ideología neoliberal. Tal repolitización está ligada a su propia tarea «pedagógica»: dado que no se ubica en el mismo plano que la educación institucional —desde la universidad hasta los medios de comunicación, pasando por la escuela y el museo (entre otras instituciones implicadas en el proceso)—, exige una revisión de los presupuestos dominantes de la enseñanza. El primer presupuesto frente al que se posiciona es la división de saberes tal y como se practica en nuestro sistema social. El PEI busca construir nuevos espacios para la educación política. Por ello se postula como un lugar para experimentar formas de relación entre —de entrada— el museo y los públicos.
Estudios museísticos. El PEI se ofrece como un programa de estudios museísticos con vocación internacional. Partiendo de la base de que la teoría crítica, la pedagogía y el museo son vectores inseparables, trata de llevar a cabo una indagación en todos esos campos. En un momento en el que la institución ha salido fortalecida de los ataques al museo característicos de la vanguardia y de las prácticas de crítica institucional de los años sesenta y setenta, hoy se enfrenta a la necesidad de redefinirse frente a la hegemonía del consumo como pensamiento dominante desde los años ochenta en las nuevas políticas e industrias culturales. En este contexto, el PEI entiende que es necesario reconsiderar el significado y la importancia del museo como institución que surge históricamente del proyecto ilustrado de una educación popular. Por tanto, el campo de los estudios museísticos se convierte en un espacio indisociable de la crítica sobre los procesos de construcción del saber y sus políticas.
Ante la actual proliferación de museos internacionales y ante el énfasis en los modelos de gestión, cuyo efecto es la hegemonía de una noción de museo vinculada a las industrias del entretenimiento de masas, el PEI quiere ofrecer un espacio alternativo. Esta alternativa rechaza las nociones de gestión y sus técnicas como base del espacio museístico y se centra en los conceptos de discurso y pedagogía desde una perspectiva multidisciplinar. El campo de los estudios museísticos se convierte así en un espacio indisociable de la crítica sobre los procesos de construcción del saber y sus políticas, que surge al constatar la centralidad del museo en la cultura moderna.
El objetivo del PEI es favorecer la actividad profesional crítica en el campo artístico y cultural, una actividad capaz de innovar y experimentar en el espacio institucional y social.
Programa y materias. El PEI articula lo artístico, la crítica de arte, la acción política, la tecnología del género y las ciencias económicas y de la ciudad en un programa que aúna las líneas discursivas que se han ido desarrollando en el museo durante los últimos años. El programa está constituido por espacios móviles de trabajo interconectados y generadores de una pluralidad de actividades.
Por otra parte, se presenta como un programa que se desarrolla a lo largo de dos años y se estructura en siete materias, que representan unas 480 horas entre clases teóricas, clases prácticas y seminarios. Habrá un taller monográfico quincenal que articulará la continuidad de las diversas materias.
Programa |
CALENDARIO LECTIVO
Cada año está distribuido en tres periodos lectivos: La estructura académica del curso se organiza por trimestres. Cada trimestre se dedica a una materia, que consta de una o dos clases semanales y un seminario o una serie de conferencias abiertas; con la excepción de la materia Teoría y crítica del discurso, que se considera troncal del PEI y se imparte en cada trimestre del bienio. Así, cada trimestre se compone de: Estos horarios están sujetos a cambio. MATERIAS Teoría y crítica del discurso. Constituye la columna vertebral del programa (está presente en los seis trimestres) y aborda las metodologías, los metalenguajes y las herramientas que la historia ha elaborado para aproximarse a la institución del arte. Imaginación política. Explora la vinculación entre la actividad estética y las formas de acción política, y va más allá de determinadas nociones de las que se vale tanto lo artístico como lo político. Economía y cultura. Indaga en lo que se ha denominado capitalismo cognitivo, un radical cambio de paradigma, que se caracteriza por la centralidad de las dimensiones inmateriales y cognitivas (y entre ellas la cultura) en los procesos de acumulación y producción de valor. Arquitecturas posturbanas. La ciudad actual se nos revela cada vez con más nitidez como un todo difuso y complejo que adquiere su verdadera dimensión en tanto que territorio de encuentro y peaje entre las tendencias generales de la globalización y lo local preexistente. Tecnologías del género. Estudia el complejo legado teórico derivado de los estudios feministas que hoy constituye uno de los ejes centrales para cualquier análisis de la visualidad. Estrategias del deseo. Analiza las convergencias y divergencias entre los espacios de la creatividad artística y los espacios psicoterapéuticos, superando las formas blandas de construir discursivamente el espacio artístico, no como un espacio compensatorio de deficiencias sociales, sino como un espacio de alteridad radical. Arte, visualidad y representación. Se trata de configurar un campo más extenso para el estudio de lo artístico y de la visualidad. Por ello, no se limita al discurso historiográfico y entiende que el campo artístico genera una forma específica de saber y de cultura, que es necesario abordar de manera expandida, transversal y multidisciplinar. Publicado por Miguel López en Artenuevo |