material para un debate

¿De donde surge la obsesión de algunos artistas, docentes, curadores y téóricos por el ‘contexto’, la ‘identidad’, el ‘margen’, lo ‘local’, la ‘comunidad’? ¿lo ‘ideológico’ y lo ‘político’?

Es ampliamente conocido el fuerte rechazo a las ciencias sociales -léase Estudios Culturales, Estudios Visuales- cuyas influencias y jerga formalizante han influenciado áreas de la historia, la teoría literaria y, por supuesto, el arte -o el «campo del arte y sus agentes» como diría un «crítico cultural».

Recomiendo la lectura de «Los estudios culturales (materiales para un debate)» de William Díaz, del que adelanto este par de parrafos:

«En su afán por revelar los elementos ideológicos y las estructuras de poder que se ocultan tras los «discursos dominantes», los estudios culturales han puesto en duda muchas cuestiones que, para los estudios literarios, parecían evidentes, como la noción de campo disciplinar, entendido como una rama del saber relativamente autónoma, y la noción de valor literario. Esta postura, me parece, ha conducido el debate sobre los estudios culturales a un punto muerto o, si se quiere, a un diálogo de sordos. Así, los estudios literarios tachan a los estudios culturales de «escuela del resentimiento» y los estudios culturales dicen que los estudios literarios son «elitistas».

«El error de los estudios culturales no está, pues, en pensar en la posibilidad de un mundo más humano y justo, sino en creer que las identidades locales van a lograr, como un hechizo mágico, semejante cometido. Y es que la noción de identidad es el producto del capitalismo avanzado y no una respuesta crítica. La identidad, como un bien abstracto, es lo único que le queda a los sujetos despojados de cualquier capacidad de determinación frente al mercado. Las identidades y las localidades son, así, el correlato cultural de los llamados «sectores del mercado», y precisamente por eso son explotables económicamente. Como es un concepto vacío, la identidad puede llenarse fácilmente de los significantes que el mercado promueve a través de sus imágenes. Ante la imposibilidad de dar un sentido coherente a «lo gay» y «lo negro», el mercado proporciona productos sustitutos como la literatura gay y la música rap. Estos productos se convierten así en los bienes simbólicos a los que los individuos se aferran como una tabla de salvación en la guerra de todos contra todos en la que se ha venido convirtiendo el mundo capitalista»

Los estudios culturales: materiales para un debate:
http://www.docentes.unal.edu.co/wdiazv/docs/