¿Qué piensa de la internacionalización del salón?
Opiniones de Beatríz González, Franklin Aguirre y Ana María Millán.
Un video de María Posse
¿Qué piensa de la internacionalización del salón?
Opiniones de Beatríz González, Franklin Aguirre y Ana María Millán.
Un video de María Posse
16 comentarios
si no estoy mal… en la parte de danilo dueñas a quien vemos de espaldas es el alcalde mismo de cali… ¿politización del arte o esteticización de la política?
Estamos en el mundo como artistas. No depende esta condición del lugar geográfico en que llegamos al mundo.
Existen las fronteras naturales: la selva llega hasta determinado punto y acaba allí, eso es algo claro; sin embargo los humanos, nos trasladamos.
Tenemos otro tipo de fronteras, como el idioma por ejemplo. El arte es un tipo de idioma en el que la palabra no necesariamente media, aunque determinada simbología haga la equivalencia de la palabra; se hace arte aunque no sepamos leer la simbología: la imagen está disponible a nuestros ojos. Depende de lo que estudie cada quien poder entrar a comprender ésta comunicación visual.
La comunicación la realizamos preferencialmente con los demás seres humanos; aunque podemos hacerlo con todos los seres vivientes, casi toda la producción artística está dirigida a personas, no a animales o plantas y demás; por eso el asunto de, frontera; debe ser tenido en cuenta no como una marca territorial que atiende a la división política del planeta, (muchas veces un dibujo arbitrario de líneas divisorias); sino a la pertenencia a una clase.
Para un salón de artes plásticas, ser artista plástico es la condición para estar en él; ser otra cosa, la condición para no estarlo. Sobre este punto es difícil hallar el límite dadas las prácticas del arte actualmente, pero ese es otro asunto; y que deberá ser estudidado y debatido.
Pertenecemos, por tanto, a una Patria común: la de los artistas. Si Platón nos excluyó de su República ideal -nunca existió concretamente-, necesitamos de una desde el momento en que hemos nacido con carne y hueso. La globalización no es del todo negativa, y esta es una de sus manifestaciones; así se puede hacer frente a los retos que ahora tenemos por delante.
De otra parte, ¿no es acaso bueno que se pueda ventilar el mundo de los artistas de Colombia?, pienso que ello da la medida a cada quien; y no que ocurra lo que antes sucedía: que artistas absolutamente mediocres -artesanos con dinero o apoyados por ignorantes con poder-, fueran tenidos localmente por genios en vida; todo gracias a la ignorancia que proporciona el aislamiento, mantenido en ocasiones con estudiada intención.
Por eso, es bueno lo que sucede.
Creo que, Nacional, se puede seguir entendiendo como que el Salón es para artistas nacidos o residentes en Colombia; otra cosa es que hayan en él invitados de otros paises, lo que no resta; por el contrario confronta, y confrontar pone a prueba.
Antonio Diez: ¿cuales artistas, en concreto, son lo que usted nombra al decir que antes sucedía que «artistas absolutamente mediocres -artesanos con dinero o apoyados por ignorantes con poder-, fueron tenidos localmente por genios en vida»?
Como de costumbre en Esfera Pública es sorprendente ver cómo algunos osan afirmar ideas como si se tratara de cuestiones obvias pero que en realidad no tienen ninguna relación con hechos concretos o pruebas argumentadas de lo que se está diciendo.
¿Se intenta poner como siempre en el papel del lobo a personas y hechos que no existen?
De por sí parece ser el clásico encadenamiento de ideas con las que se envilece el razonamiento discursivo, llamando de ignorantes a los sectores que apoyan determinadas prácticas artísticas ¿cómo cuales? ¿La pintura con oficio por casualidad?
De otra parte, esa visión de considerar un trabajo con preocupaciones artesanales inferior a otro tipo de propuestas no es más que una discriminación decepcionante por no decir inaceptable.
Por último si el «Salón Nacional de artistas», es un salón de arte colombiano, que dice representar lo más interesante de la plástica nacional, es importante tener claro que muchos artistas colombianos no nos sentimos representados en ese salón como tampoco creemos que el mismo represente al arte de nuestro país.
Cordialmente,
Apuntes Críticos
(Favor no encerrarnos en discusión personalizada…)
RESPUESTA A APUNTES CRITICOS
Estimado(s..?)
Si puedo saber el(os) nombre(s) de pila de, Apuntes Críticos; no tendría mayor problema en citarle algunos nombres. Sin embargo, si Uds. se llaman «Apuntes críticos», bien podrían citarnos a algunos de los falsos genios a que hago alusión. Además, no citar con nombre de pila alguno, tiene por objeto no darle nuevo aire a quien ya por sí mismo, no consigue hacerse notar. Si algo conocemos de nuestro medio artístico local, de nuestra historia del arte; creo, con sinceridad, que somos capaces de abstraer.
La falsa genialidad, (yo creo que sí es posible que hallan genios, aunque el concepto de, Genio se considere romántico, y el Romanticismo esté en contra de ésta época), puede reconocerse por una aceptación sin reparos -en vida-, de un artista y su obra; el genio, lo es porque se adelanta a su época, por eso mismo choca con los valores que ella establece, por eso no se dan genios exitosos en vida; o, si lo logran; es tan sólo por un pequeño intervalo. El genio, reelabora con la tradición, un traje tejido de una forma nunca antes hecha; pero aquello que elabora, es a la postre un traje.
Le aclaro que cuando me refiero a «artesanos con dinero», me refiero a ése tipo de artista que piensa una sola idea, que repite incesantemente un solo asunto; porque tiene muy poco que comunicar. Es algo análogo a la artesanía: una repetición de formas sin algo de novedad en su contenido, como si la vida de quien la hizo, no tuviera ningún sobresalto, ninguna duda acerca de si el mundo es cambia.
Para referirme a los ignorantes con poder; le digo que tienen conocimientos de otro ámbito,
[regularmente político, de mercado…]; mas no necesariamente del valor artístico actual.
No tengo lo más mínimo en contra de la pintura (de hecho, yo pinto); estoy, sí, totalmente en contra de creer que el medio por sí mismo hace de algo una obra de arte. El arte es un problema de forma; pero la forma sólo es el vehículo de los sentimientos, de las ideas que ella nos comunica.
Las prácticas artísticas son variadas, y la pintura, se halla con total validez hoy día dentro de las mismas. Se puede constatar en una muestra como «20 desarreglos» [Museo de arte del Banco de la República, Bogotá. 2008]
El trabajo de arte involucra (aquí sí dudo), siempre una parte artesanal; pero no porque se trate de un oficio ya aceptado dentro del arte; sino, porque se diferencia de un trabajo industrial o repetitivo, a consecuencia de que, el artista, vive en constante cuestionamiento; mas, su fin último, no es lucrarse. Se dice que Picasso afirmó: «Un pintor, es aquel que hace lo que vende; un artista, vende lo que hace».
Del Salón Nacional de Artistas que actualmente se realiza en Cali, no puedo referirle por el momento a Apuntes Críticos, nada más fuera de lo que ya expresé; porque no lo he visitado aún. Sin embargo, piense un momento: si idealmente eliminamos cualquier impedimento distinto a la mera voluntad del individuo, para poderse mover libremente por el mundo sin atender a las fronteras existentes, ¿hasta dónde llega Colombia o cualquier país..?
Cordialmente,
Antonio J. Díez
Antonio Díez, Agradezco su respuesta razonada.
Le respondo que Apuntes Críticos, es un espacio para el arte y para la crítica de arte, su autor es el artista colombiano Dimo García. (http://www.javaleegarcia.blogspot.com/)
Sobre el tema, como casi todo lo usted dice lo comparto – excepto una que otra idea menor que habría que precisar despues – quisiera por el momento retener solo un contenido al cual adhiero plenamente y trata sobre la validez de la pintura como un medio contemporáneo, como lo son todos los demás.
Sin embargo, personas influyentes en el medio artístico colombiano, no lo creen así.
Es solo ver una declaración como la del señor Jaime Cerón para el periódico EL Tiempo:
“Antes se hablaba de cuadros, dípticos, trípticos, polípticos y cosas que fácilmente podrían colgarse en un muro. Ahora se habla de crear con sonidos, con aromas, con luz y piedra caliza. La producción se hizo compleja y requiere de un trabajo fuerte con los espacios, las obras y las exposiciones.”(1)
Según estas declaraciones para Jaime Ceron los cuadros son “cosas” y nada complejas frente a lo que él considera como la produción artistica actual.
De una persona cualquiera, incluso de un simple egresado de artes plásticas una declaración como esta vaya y venga, pero si los que afirman este tipo de exabruptos frente a los medios masivos de comunicación son personas que dirigen algunos de los eventos más importantes de la plástica nacional, no se puede sino sentar una categórica voz de protesta.
Igual no solamente es necesario exigir que paren estas declaraciones absurdas, sino que debe reclamarse que la pintura de calidad sea representada en igual proporción que las otras manifestaciones visuales en un salón como el salón nacional, si es que éste pretende representar lo que se está haciendo en arte en Colombia.
Sino lo mejor es que le cambien el nombre a este salón porque no parece ser representativo ni objetivo de lo que se está haciendo en artes plásticas en el país.
Hasta pronto,
Atentamente,
Apuntes Críticos.
(1)http://cali.vive.in/arte/cali/articulos_arte_cali/noviembre2008/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR_VIVEIN-4646490.html
NO HAY INFORMACIÓN SOBRE ARTE
Ni hablar de los medios masivos de comunicación y la forma absurda, fragmentada en la que cubren estos eventos importantes para el arte y la cultura locales. La trampa arte-artesania es el hoyo en la que caen los periodistas como Diego Guerrero. Creo que es en parte culpa de los medios que el arte contemporáneo (las retrospectivas son otro asunto de lo que se encargan los museos. la industria cultural etc) no llegue a donde tiene que llegar, esto es, a un público mas amplio. De hecho, los medios NO CUBREN ESTOS EVENTOS, no hay programas de TV especializados donde escuchemos conversaciones serias, entretenidas e inteligentes con los artistas colombianos e internacionales. Vive-in-cultura.
Es ridículo que la cultura se caricaturice con fórmulas pastiches para ganar audiencia, y terminemos resignados en la mediocridad «agradeciendo» que haya tal o cual programa sobre cultura. El arte no es solo el objeto… el producto, el arte son los procesos. Y en eso si debemos abonarle al proyecto como el salón nacional su esfuerzo por ir con los tiempos de hoy (bueno, sería el colmo que no lo hiciera…); las curadurías regionales y las investigaciones en ese orden han intentado trascender la región y los resultados han sido interesantes. habría que ver realmente, cuál es la función del curador: si la de representar artistas para exhibirlos en los espacios o si se trata de dialogar y recontextualizar el trabajo del artista hacia una versión de la propuesta mas COMPRENSIBLE menos rebuscada y mas accesible al público general. Creo que esa es la función realmente del curador: la de dialogar con los artistas para acercarse al público!!! REPLANTEAR el trabajo del arte hacia un mayor ALCANCE de la obra… no la de servir como representante del artista y para conseguirle un espacio o una pared mas grande donde pueda exhibir su «obra». Creo que los curadores del salón debieron hablar MAS Y MEJOR con los curadores regionales para hacer un trabajo colectivo y lo que ocurrió fue que los curadores «mayores» impusieron su visión desconociendo totalmente las propuestas de las regiones, o mejor, subestimándolas que es peor… de nuevo la relación de poder centro-margen se impone y los problemas se repiten. Un espacio académico hubiera sido muy bueno para debatir estos importantes temas.
Muy interesante lo que dice Beatriz Gonzales, quisiera saber mas sobre las obras…
Luisa en Bogotá.
Una nota al pie:
Creo que la palabra «producción» en boca de Jaime Cerón en el periódico el Tiempo, se refiere no a la producción de arte contemporáneo en Colombia, en términos del tipo de arte que los artistas hacen, sino a la producción en términos de montaje e instalación de las obras de arte (cualquiera que sea su formato) en el salón.
Pues ese fue el trabajo de Cerón en el Salón, encargarse de coordinar el montaje y la producción para que eso que llamamos arte se pudiera ver en muchos espacios al mismo tiempo. Y no sobra anotar, que muchos de los espacios no están adecuados para la exposición en sus salas de los múltiples y variados medios en que se hace el arte «contemporáneo».
En ese sentido, no veo por qué una afrimación como la de Cerón, sobre lo complicado que es hacer la producción de un salón (que ya no es solo de pintura como en sus inicios) se preste para confusiones. Acaso taladrar un piso con cuidado para que caiga un hilo de arena, conseguir arena de río seca en epoca de lluvia, instalar sonido que se oiga en un cuarto pero no se riegue por todo el espacio anulando el sonido de las otras obras con sonido, oscurecer salas para la proyección de video y colgar el soporte que sostiene el video beam, como si esto fuera poco hay además que construir trampas de luz y asegurar con guayas los equipos para que no se los roben y se pueda ver esa obra a lo largo de los tres meses que dura el salón, subir un Renault 4 a un segundo piso, pedir permisos a la ciudad para que un grupo de uniformados rocíen perfume en una calle transitada, hacer que todo esto pase, ayudar a los artistas a que su obra se monte como debe ser no es acaso más complicado que poner una serie de pinturas (por más increíbles, enormes, fantásticas que estas sean) en un muro?
Yo francamente creo que ya nadie se pregunta por la pintura como medio. La pintura existe, a todos nos gusta, se sigue haciendo y nadie se mete con ella. No creo que haya que rescatarla de ningún lugar ni defenderla, pues nada como la buena pintura para dejarnos a todos boquiabiertos.
Así que creo el problema no es contra la pintura, no puede ser. Creo que más bien se trata de un problema de lectura. Tal vez toca mirar lejos, más allá de la superficie.
Me permito adjuntar la entrevista en cuestión. Y de paso enfatizar -como lo hace María Angela Méndez- una cosa es la curaduría y otra, muy distinta, la producción.
Entrevista con Jaime Cerón
Jaime Cerón es un bogotano que por estos días toma café desde las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche. Su rol: director de producción. Cerón es el encargado de adecuar y preparar todos los espacios, las obras y las exhibiciones del 41 Salón Nacional de Artistas, que va del próximo 19 de noviembre al 30 de enero de 2009.
Su oficio como curador y crítico de arte hace que Cerón toque necesariamente todas las áreas que mueven el arte contemporáneo. Las dimensiones de lo operativo, lo logístico y las adecuaciones de espacios también son parte del proceso. En Medellín dirigió el equipo de producción del Encuentro MDE07, durante 6 meses, con gran complejidad logística. Igualmente trabajó para la Alcaldía de Bogotá poco más de un año y con ellos hizo 1200 eventos en menos de un mes. Ésos antecedentes hicieron que el Comité Curatorial del Salón Nacional lo llamara a Cali.
¿Cómo es la producción del evento más grande en la historia del arte en Cali?
Muchos podrían decirte que no relacionan a un productor con un evento de arte, pues lo que se piensa es que hay un conjunto de obras que implican transporte y un espacio para ser colgadas. Ése rol lo desempeñaría un director de montaje y el curador del proyecto. Antes se hablaba de cuadros, dípticos, trípticos, polípticos y cosas que fácilmente podrían colgarse en un muro. Ahora se habla de crear con sonidos, con aromas, con luz y piedra caliza. La producción se hizo compleja y requiere de un trabajo fuerte con los espacios, las obras y las exposiciones.
¿Cuál es la dinámica de trabajo en producción?
La dinámica es que los curadores definen cómo quieren el espacio y me dejan a mí el trabajo de adecuación y tranformación.Tenemos un equipo de 7 personas para la adecuación y transformación de la infraestructura cultural de la ciudad. Nuestros proyectos más grandes son el Colegio de la Sagrada Familia, con 57 espacios de exhibición), Bellas Artes (la sala alterna, el salón 101, el taller de arte y el nuevo hall de exhibción) y el Museo de Arte Moderno La Tertulia, al que le estamos haciendo una especie de cirugía estética, para eliminar todas las cicatrices que le han dejado los años de exhibición permanente.
¿Cómo estamos en infraestructura para el arte en Cali?
Creo que Cali es una ciudad con una estructura cultural significativa y amplia, considerando sus dimensiones en población. Tener 2 escuelas de arte habla del anhelo de la ciudad por el arte. Sin embargo, el desafío de los planteamientos regionales, que se tomaron toda la infraestructura existente en sus respectivas regiones nos exigió tener más de 100 salas de exhibición, cosa que la ciudad no tiene. De ahí que estemos interviniendo nuevos espacios como las escuelas de Bellas Artes y el Colegio de la Sagrada Familia. Éste último es un espacio como pocos he visto, donde todas las condiciones, los muros, las proporciones son ideales para instalar proyectos artísticos.
¿Qué diferenciará a éste salón de los eventos del pasado?
El rol del Comité Curatorial ha sido fundamental, pues ellos se sentaron a revisar todos los proyectos regionales buscando establecer más que relaciones geográficas o ser políticamente correctos con los proyectos. En el pasado éstas preocupaciones no han permitido hacer comprensibles las propuestas de los artistas del país.
El Comité leyó proyecto por proyecto y encontró preguntas recurrentes de los artistas, interrogantes que quizás también surgen en la mente del observador. Esas preguntas comunes lograron poner en diálogo las exposiciones, de forma que el arte se convierta en una verdadera reflexión sobre tres preguntas o núcleos básicos:
¿Cuál es el estatus de la imagen en un mundo saturado?
¿Cómo se aproxima el arte a los problemas que vivimos?
¿Cuáles son los modos de interacción y participación en el arte?
De ahí, creo que la lectura de los proyectos será exitosa, pues se logra un análisis de las cercanías y las diferencias entre las propuestas y se logra comprender más fácilmente la experiencia nacional del arte colombiano. Creo que muchas personas llegarán a Cali, de muchos rincones del país y de otras naciones, porque la propuesta ha sido realmente diferente para éste Salón Nacional.
¿A qué artista esperas con gran expectativa?
A Alfredo Jaar, una luminaria del mundo del arte, que ya lo era desde que empecé mis estudios. Es un artista latinoamericano supremamente importante, que ha invertido su propio dinero para traer una obra a la ciudad. Un imperdible del salón.
Publicado el Martes 5 de Noviembre de 2008
Publicado en El Tiempo
http://cali.vive.in/arte/cali/articulos_arte_cali/noviembre2008/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR_VIVEIN-4646490.html
Mariangela,
Del anterior mensaje deduzco entonces que en el salón de artistas había pinturas que sorprendieron y gustaron a los visitantes, realizadas por artistas jóvenes y en igual proporción que obras en otros medios.
Si es así no hay porqué defender a la pintura, el problema sería que todo el mundo supiera que hay una buena producción en pintura nacional y que no aparecen en ningún lado representada en algo que se llama “Salón Nacional de artistas”.
Pero según la explicación dada si estaba bien representada. Sería interesante ver el trabajo de adecuación de los espacios que realizó Jaime Cerón para los lugares donde se presentaron estas obras pictóricas, que de seguro requerían de cierta iluminación especial, de cierta calma para la contemplación.
Celebro entonces este cambio en relación a Salón de años anteriores al incluir pintura. Ojala siga así el salón, poniéndose a tono con la producción internacional en arte, especialmente ahora que la pintura está pasando por una explosión en todo el planeta.
Apuntes Críticos.
Postdata:
!No sabía que Jaime Cerón ahora era ferviente amante de la pintura!
!Qué cambio…otra razón más para celebrar!
Qué alegría, un gran saludo para Jaime.
Apuntes Críticos.
No entiendo su parafraseo señor A. Críticos. Tal vez hay humor en su comentario y yo no lo alcancé a percibir. En ese caso me disculpo. Pero yo no dije en mi comentario que en el Salón había pintura. Simplemente aclaré el uso de la palabra producción para la discusión que estaban iniciando, pues me pareció cómica toda esa vuelta que estaban dando para decir simplemente que en el Salón no había pintura y la extrañaron. Qué es más difícil de montar es otro problema.
Para podernos entender, creo entonces que hay tres cosas distintas en juego: 1.Producción. 2. Curaduría del Salón. 3. Ausencia de pintura.
Por qué insitir en revolver las tres?
Sobre la curaduría del Salón me preocupa que ahora este no solo debe representar las diferentes regiones de Colombia (lo que sabemos no se puede hacer, pues siempre quedará algo por fuera en ese intento futil de sonar coherente al hablar de identidad), sino que además deba representar todos y cada uno de los diferentes formatos y medios en los que se produce arte hoy día. Y además representar aquí también implica que esto se haga en su justa medida. Y como si fuera poco, también debe ofrecer una buena exposición curada alrededor de un tema que no sea la representación. Y todo esto se debe hacer en una carrera loca contra el tiempo y con recursos que no son ilimitados. Difícil tarea la de los curadores, no les parece? En ese caso preferiría no hacerlo.
Y respecto a la ausencia de pintura, que insisto no es un tema que me trasnoche, pues cuando está, está, pregunto cómo es posible desde la curaduría representar en igual medida a la pintura y al video, por mencionar cualquier medio, si cada vez los ARTISTAS hacen menos pintura y en cambio, si producen más video? No sería en ese caso representativo el Salón al mostrar, en su justa medida, que hay más video que pintura cuándo de poner la imágen en cuestión se trata?
No hay que olvidarse del marco de trabajo sugerido por los curadores del 41 Salón Nacional y cada uno de los 12 Regionales, la crítica debe hacerse desde ahí, no desde el gusto particular, pues es claro que cada uno de nosotros lo hubiera hecho diferente. Supongo entonces que habrá mucha pintura en los próximos regionales, que emoción, quiero ver pintura. Ojalá alguno de ustedes haya propuesto su curaduría soñada al Ministerio.
Tres debates distintos y un sólo Salón…
Comparto la afirmación de que hay tres casos en juego. Y en esa medida se trata de tres debates distintos: el de la curaduría, el de la producción y el de la exclusión (lo ecológico, lo pictórico, lo queer, lo social y todo aquello que los curadores excluyen al tomar una u otra decisión).
Para el debate de la curaduría es bueno conocer la posición curatorial (texto) y, en lo posible, haber visto el salón. Lo msimo para el tema de la producción, que tendría que ver con una discusión sobre el montaje y la puesta en escena de las obras. Y el debate de siempre: el de la exclusión, con los señalamientos de lo que queda fuera del salón y que podría dar pie a futuros proyectos curatoriales.
Para un debate sobre la curaduría qué bueno sería revisar este salón como lo propone Carlos Salazar:
«…el texto curatorial de nuestro Salón “Urgente”, parecería en gran medida su reflejo metodológico. Los curadores tratan de anticiparse, mediante la evasión de la afirmación – que todavía en la bienal de Sao Paulo de Alfons Hug se podia emitir sin vergúenza- en favor de la pregunta, a cualquier desenlace al que su “urgencia” lo lleve cuando el telón se levante:
“¿Cómo aproximarse desde el territorio del arte a los problemas políticos, sociales, económicos y raciales, para resignificarlos? ¿Cómo transformar los modos establecidos de representación, muchas veces arbitrarios e impuestos, a partir de nuevas miradas críticas? ¿Cómo cuestionar la noción misma de la representación? ¿Qué rol cumple el arte ante una realidad compleja?”
“¿Cuáles son los modos posibles o deseables de participación? ¿Cuál es el límite entre el arte producido por artistas para y con las comunidades y un programa social? ¿Cómo resguardar al arte de los imperativos de lo políticamente correcto? ¿Cómo educar desde el arte? ¿Puede hablarse de una dimensión ética en el arte, y en tal caso, qué efectos conlleva? ¿Cuál es la relación entre pedagogía artística y obra de arte? ¿Cómo provocar la mirada artística? ¿Cuál es la necesidad de la acción?”
posición curatorial
http://salonesdeartistas.com/41sna/posici%F3ncuratorial.pdf
Es de esperar que tales preguntas, al final del ritual equinoccial del evento artístico, sean respondidas por el curatoriado que las formuló y por los artistas que fueron involucrados en el proceso y ello por el bien de quienes se siguen preguntando si el arte puede llegar a tener un impacto sobre las estructuras sociales y el corpus constitucional más allá del “gusto comprometido” burgués que decora el “cubo blanco” y sentimentaliza la conciencia en vez de provocarla.
Para muchos de los que seguimos con gran interés el desarrollo del Salón, más que preguntas, tanto esas líneas curatoriales como el impacto que se nos asegura se generará sobre la comunidad política a través del Salón, son promesas por cumplir. Es de esperar que al final del evento no nos encontremos con un ritual más de “slumming” cultural del cual solo quede el salto cualitativo de mercado de la colectividad corporativa del arte de guerra oficial y que del “otro” cazado, usado y exprimido su tuétano estético, solo quede su ícono hipostático en una colección suiza, un museo o un hall de la City. Un “otro” que alienado de su ser social se quede pensando que la solución a su realidad son las reivindicaciones simbólicas prometidas por unos activistas estéticos que han supuestamente expropiado heróicamente a la política su “capacidad de acción”.
Las preguntas quedarán celosamente guardadas. Y veremos si se hicieron para ser respondidas o si fueron hechas para promocionar capital cultural.
¿INTELECTUALIZACIÓN DEL SALÓN?
….entonces ¿todo vale? es decir, si no se puede construir una identidad múltiple, desde lo regional, por qué sí se puede dividir en «tres ejes temáticos» CONCEPTUALES (los curadores del salón dividieron TODO en estos tres grupos donde yo no veo claramente las diferencias y eso que yo estudié historia del arte, digo, no son evidentes lo criterios para lo cual lo hicieron…daría lo mismo otra cosa.
se imaginan al señor de los tintos o el contador o el ingeniero pasando por la calle y leyendo el pendón: «representación y presentación» … «Que repre-qué! Qué es esa vaina», dirían. es decir, me parece que las cosas se le podrían facilitar al público para que éste pudiera hacer una lectura mas fácil: buscar puntos en común evidentes entre las obras por ejemplo: las figuras de Walker con las imágenes de Palenque, no se lo afro… la reflexión de «lo nacional» hay trabajos que reflexionan sobre esa pregunta.. ¿porqué no ponerlos cerca? ¡porque unos eran regionales y otros internacionales…! Eso le hubiera dado una dimensión diferente a lo afro… y hubiese sido mas INCLUYENTE, menos jerarquizado (artistas de la región afuera – artistas invitados e internacionales adentro) algo mas comprensible, sencillo y menos «rebuscado» complejo, la pregunta que yo hago es diferente: ¿INTELECTUALIZACION DEL SALÓN?
Lástima que se intelectualizó la curaduría… creo que esa parte podría ser mas simple. ¡Menos preguntas y mas respuestas!
saludos Luisa en Bogotá.
SOBRE LA PRODUCCION
Una vez mordida la carnada, no hay Santa Lucía que valga, decía Blanquita, una campesina de las afueras de Usme, un pueblito devorado por nuestra Metrópoli. Dimo García no se dejó atragantar con la idea que tenemos hoy de Producción. No pasó entero, no ignoró la perversión de su sentido original. No sobra recordar, esto lo saben bien los artistas y los poetas, que para los griegos producir consistía en poiesis, es decir, sacar a la luz, revelar, traer a la presencia, esto era lo que ellos entendían por pensamiento y arte en sentido general. La Producción hoy en día es un asunto de organización y administración de un espectáculo, de utilería. ¿Los curadores están siendo desplazados por el productor? ¿Los artistas siguen pegados a la carnada que les ha tirado la Institución Arte y sólo les llama la atención el montaje, las cuerdas y las puntillas? Las puntillas mal puestas se pueden corregir de un día para otro, la ausencia de pensamiento no. Las puntillas seguirán siendo importantes, pero no son lo más fundamental. ¿Cuándo vamos a hablar del pensamiento que plantean los artistas en sus propuestas? ¿O es que en verdad ya no hay pensamiento artístico? ¡Ahhh! ¡Yo no lo creo! Pluto: ¡aún no has vencido! Cali es más que pachanga.
La discusión está interesante. ¿Jaime, podría considerar cerrar unos días más tarde esta Ágora?
MUCHOS EQUIVOCOS EN UNO
La producción es común también a los conciertos masivos; lo que por tal entiendo, es la organización para que el espectáculo salga adelante; y, eso, nada tiene que ver con la calidad.
Tal vez las artes plásticas se equivocan cuando tratan de compartir formato con los espectáculos masivos.
Lo que por arte comprendo, está más relacionado con un ritual cuyo fin es liberar: de la ignorancia, de la oscuridad reinante, de las ficciones,; incluso de la propia vida. Un ritual, en últimas, en el que su comprensión poco requiere de andamiajes de espectáculo: es más sencillo; por eso mismo, claro. Y requiere [así lo veo], estar sólo o con muy pocos para captar su mensaje, casi algo privado.
Del asunto, pintura sí-pintura no; pregunto: ¿si hipotéticamente desaparecieran, como por arte de magia, los medios de obtener fotografías, sería bienvenida..?, o ¿renunciaríamos a buscar imágenes exteriores, y nos conformaríamos con imaginar..?
«Los ojos existen porque hay algo que merece ser visto.»
Krum Heller
Si pedimos manifestaciones sensibles [no sólo visuales], como las imágenes externas, entonces cualquier medio de los útiles para eso, serviría; porque HAY ARTISTAS, NO ARTE. ARTE ES AQUELLO QUE HACEN LOS ARTISTAS.
No verlo, es torpeza: los artistas no se acaban, acabando los medios; pero la pueden pasar mal, por manejos errados de quienes usan los medios con fines -quién sabe-, a qué.
De otra parte, ¿Que tiene que ver el número [por los eventos realizados, según Cerón], con la calidad, con el nivel…?
«Dudamos en sentir lástima o no, del toxicómano que se satura con cocaina; pero no del toxicómano, más estúpido aún, que ingiere velocidad.
[…]
Se aduce con frecuencia, que la velocidad de la vida moderna, no nos da tiempo para vivir; pero esto es una gran mentira. La vida exterior va a toda velocidad, pero nada hay afuera que sea interesante; y, en consecuencia, interiormente, no nos movemos. Es una época absurda: vamos incesantemente de una a otra parte; pero, como en ninguna parte algo nos ocurre; nos aburrimos.
[…]
Estúpidos toxicómanos de velocidad»
Eróstrato y la busqueda de la inmortalidad. Fernando Pessoa
Equívocos propios de quienes se la pasan revueltos con políticos de los que adquieren su contaminación: «asistieron tantos miles de personas…», dicen con orgullo. ¡Contagiados..! lo que ya no les permite mirar más alto. Utilizan los números como culebreros, pero no son científicamente usadas las matemáticas por ellos.
EL DURO APRENDIZAJE DE LA SENCILLEZ
¿Cómo resistirnos al espectáculo? Creando hábitos de pensar. Estoy de acuerdo con Antonio Díez. El espectáculo espanta al pensamiento. Su principio es la banalidad per se, por lo tanto, en su reino ninguna idea puede germinar o prosperar. La emancipación que sugiere Díez le resultaría subversiva, pues, se nos dirá que el pensamiento es nada y que la laca para el pelo lo es todo.
Perturba el que estemos incorporando para pensar y socializar las prácticas del pensamiento artístico colombiano una categorización pertinente para el Show business o los oficios artesanales, es decir, para aquellas actividades cuya finalidad no es una preocupación sincera y permanente por la emancipación del hombre y la mujer. Si en este Salón Nacional los curadores parecen haber sido desplazados por el Productor, en los próximos será el director de Efectos Especiales o el luminotécnico, el dueño de la escena plástica. Bienvenidos al futuro, decía un político colombiano.