Estoy completamente de acuerdo con los planteamientos hechos por Josè Ignacio Roca y el comentario de Lucas Ospina sobre «A quiénes sirve el patrimonio».
Qué lejos estamos aún de entender, en la práctica, el verdadero sentido de patrimonio y actuar en consecuencia; no se trata , como lo dice Roca, de argumentar sólo por lo ocurrido en el medio europeo, puesto que son realidades culturales diferentes, pero aún nos sorprende cómo hacia finales de los 60 el «Accionismo Vienés» realizó una de sus acciones en la Iglesia de San Pedro en Lubeck, con todo cuanto una acción de este grupo significaba para el momento y toda esa carga agresiva y dramática que motivaba a sus artistas; aùn hoy, no falta quién se pregunte «¿y qué pensaba la Iglesia?» «¿cómo reaccionó el estamento eclesiástico?» si se aceptó tal gesto, ya hay una «aprobación» independientemente de opiniones posteriores.
Insisto en que es sólo un ejemplo ilustrativo, guardadas las diferencias y distancias.
Pero mi participación en el tema está dirigida, ademàs, a invitar a artistas y a quienes de una u otra manera estamos en el medio, a que reflexionemos sobre nuestra participación respecto al Patrimonio: no se trata únicamente de que hagamos alarde de contar con Patrimonio muy rico, sino tambièn, de aprovechar el momento para cuestionarnos a nosotros mismos sobre qué tanto conocemos (el Patrimonio) y, si está en nuestras manos, qué estamos haciendo para que ese Patrimonio se conozca, se valore y se sepa utilizar; no basta mostrarnos como «guardianes» de un tesoro, si no sabemos qué encierra!
Valga la reflexión para cuestionar el papel cumplido al respecto por Colegios, Universidades, Talleres, Instituciones, etc.
Es ese «diálogo con el padre y el abuelo» de que habla Roca, para poder contar con argumentos suficientes para actuar y no dejar que se mueran de tristeza en un asilo».
Augusto Ardila Plata
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Suspicacia p.d.
p.d. “una cosa que vale la pena analizar”: Al leer la transcripción que hizo Pablo Batelli de una jornada sobre lo pictórico (donde Carlos Salazar y Jose Ignacio Roca intervienen) se lee que las preguntas suspicaces de Vergara retoman una suspicacia con la que Roca cerraba el diálogo:
“Es singular que haya una crítica, un “backlash”, una reacción tan fuerte del medio pictórico hacia el arte socialmente comprometido en el momento en que el mercado comienza a mirarlo. Yo creo que esa es una cosa que vale la pena analizar…”
http://transcripcionplastica.blogspot.com/2006/02/jornada-de-reflexin-sobre-lo-pictrico.html
L.O.