Esto es como un sueño

IMAGEN-12840763-2

José Antonio Suárez habló en exclusiva sobre su muestra en la Bienal de Venecia.

El lunes pasado, el talentoso artista José Antonio Suárez llegó a Italia como uno de los invitados de la mundialmente reconocida y respetada Bienal de Venecia. Y aunque ha visto varias veces la vitrina en la que se exhibe su obra Franz Kafka, Diarios II, del año 2000, todavía suena incrédulo cuando habla de ella.

No es para menos, pues en una entrevista que este escurridizo artista le dio a EL TIEMPO desde la ciudad italiana, confesó espontáneo, bromista y feliz que estar allí es lo mejor que le ha pasado.

¿Fue el mismo curador de la Bienal, Massimiliano Gioni, quien lo invitó a participar?

La historia es que este señor vio una exposición que hice en el Drawing Center, de Nueva York, el año pasado, con 70 dibujos. Parece que le gustó mucho y me contactó en enero, que ya, me imagino, era muy tarde para participar. Pero se hizo todo y están instaladitos, lo más bonitos. Muy emocionante.

Más emocionante debió ser cuando recibió la noticia…

Yo le dije: ‘¿Bienal de Venecia? Espérese a ver y yo veo qué es eso’ (risas). No, pues yo casi me muero de la emoción, yo no lo podía creer. Le decía: ‘¿Cómo? ¿El curador? ¿Y bueno, como qué necesita? Y entonces ya me echó la historia de Nueva York y me preguntó que si me interesaba, y yo le dije: ‘Pues voy a ver si tengo un campito por ahí’ (risas). No, yo ahí mismo le dije: ‘¡Claro! Lo que usted diga, señor’.

¿Cómo siguió el proceso?

Él mandó a tomar fotos a toda la obra y vio que eran 366, entonces dijo que los quería todos. Y empezaron los papeleos aburridores.

Son 366 dibujos, hechos en cada día de un año bisiesto…

Sí, están todos en una vitrina, la más hermosa que se pueda imaginar. Yo nunca los había visto así, puestos uno al lado del otro, porque yo los tengo en una libretica.

¿Por qué escogió para esta obra el diario de Kafka?

Empecé en el 97 a leer diarios de gente y hago un dibujo basado en lo que leo. Es decir, una obra por año y ya llevo más de 15 años.

¿Por qué se interesó en los diarios, en la mirada íntima?

Yo creo que en ese año decidí que necesitaba una información de afuera, que no fuera solo lo que estaba en la cabeza mía y lo que veía y oía, sino que tenía ganas de que alguien me dijera algo al oído, como: ‘Usted tiene hoy que dibujar esto’. Y empecé con el diario de Brian Eno, A year, y me envicié. El segundo fue de Paul Klee, siguió Delacroix y pintores y escritores, y así…

¿Qué relación encuentra entre el nombre del pabellón central de la Bienal, ‘Palacio enciclopédico’, y su obra?

Cuando yo estaba chiquito lo que más me gustaba a mí era el diccionario Larousse. Entonces, yo dije: ‘Está todo conectado’.

¿Después de la Bienal, qué le falta a José Antonio?

(Risas). Como nada… Es que yo nunca espero como nada. Para mí, esto es como un sueño. Nunca me imaginé y nunca trabajo pensando en que voy a ir allí. No tengo ambiciones de ese estilo. Pero esto para mí sí es lo mejor que me ha pasado. Lo mejor que le puede pasar a un artista, yo creo, es que lo inviten a esta Bienal y aquí estoy… Después, no sé qué pasará.

¿Quiénes están exponiendo cerca de usted?

Son como salitas. La mía es chiquita, sobre Literatura, como gris, un poquito oscura y la iluminación está sobre las obras; entonces es impecable. Estoy con una turca, que hace unos animalitos basados en Borges, como un bestiario; el otro señor parece que es un artista italiano, viejito, que hace como una biblioteca, basada también en Borges. Y hay una animación, como de los años 20, de un gringo. Muy bonita, yo creo que de ahí salió el Submarino amarillo de los Beatles, como psicodélica, antes de lo psicodélico. Entonces, muy buenos vecinos.

***

José antonio suárez londoño

dibujos 1999-2011

Recientemente, la editorial colombiana Letrarte publicó este libro, que recoge una selección de los dibujos del artista de Medellín y varios textos sobre su trabajo.

 

3 de junio de 2013
Melissa Serrato Ramírez
publicado por El Tiempo

3 comentarios

… siempre he valorado más el arte íntimo, garantiza legitimidad; y a la larga se sostiene mejor en el tiempo, sobrevive, ya que no obedece a la demanda inmediata