Iniciamos una serie de entrevistas en torno al derribo de monumentos en el marco del Paro Nacional. En esta primera entrega conversamos con el historiador Elkin Rubiano, quien cuyas participaciones en La Sociedad del debate (grupo de esferapública en Facebook) parten de preguntarse si las acciones de derribo realizadas por la comunidad han empezado a perder potencia simbólica.
«Si la idea es buscar apoyo y solidaridad, creo que el potencial simbólico de las primeras acciones se les está agotando a los Misak, si no es que ya se agotó por completo» ¿La potencia simbólica hasta cuando puede extenderse? Lo que algún momento es una ruptura radical, se está convirtiendo, creo yo, en una rutinización de esa ruptura» -Elkin Rubiano
1 comentario
Bien por los Misak. No debería haber ninguna estatua de genocidas por más que tengan «sentido» para la ciudadanía por dar una historia… O si no pongan cientos de estatuas de Uribe… Porque obvio ha cambiado la historia.