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La sentencia «en Colombia hay crítica de arte» ya es una frase recurrente; tal vez su uso continuado se deba a la eficacia con que algunas publicaciones periódicas desmotivaron el pensamiento crítico, propiciando el que personas con una posición crítica hayan desarrollado obra visible mediante el ejercicio habitual de la reflexión. Resulta preocupante que sean primordialmente artistas y estudiantes quienes terminen cuestionando el acontecer artístico, generando textos fundamentales para efectos de reflexión, capaces de indeterminar el potencial y los límites de unas instituciones culturales autocráticas y obsoletas, además de ser suficientes como documento histórico. Si bien el medio convencional de la crítica de arte han sido los medios impresos, la difusión del pensamiento a través de otras plataformas, en especial el internet, ha demostrado que la crítica existe y se abre a otros públicos, sobran, en cambio, iniciativas que concreten esta voluntad en piezas preciosas de escritura.

El Premio Nacional de Crítica pretende ser un espacio para que estas destrezas se materialicen en un evento, un premio y una publicación que motiven demostraciones de estilo y erudición. El género escogido para escribir los textos es el ensayo, por ser este el que mayor empatía tiene con la crítica de arte convencional, que durante décadas se atrincheró en departamentos de curaduría e instituciones culturales del Estado.

Una de las características básicas del ensayo es la de privilegiar una visión impersonal, obtenida tanto a partir de diversas opiniones consultadas como de una observación indirecta de los hechos* y la de comunicar no «la verdad, sino su desaparición»**; características afines un punto de vista acrítico y desafortunadas para la interpretación de una obra de arte. Además, el ensayo, libre de los requerimientos absolutos de un tratado o probatorios de una tesis, se permite la licencia de saturar con piruetas y ocurrencias a su principal destinatario: el lector carente de una punto de vista propio, de un criterio y de la facultad de ejercer por si mismo el pensamiento crítico.

El carácter anual del Premio Nacional de Crítica señala una preferencia por ideas que giren en torno a lo sucedido recientemente en el campo de la actividad artística en Colombia y, aunque no se excluyen pensamientos que distorsionen lo sucedido en otras épocas, se considerará irrelevante la generosidad con que el ensayo permita al lector interpretar el presente.

El lanzamiento del Premio Nacional de Crítica y su premiación estarán acompañados de conferencias y actividades paralelas que generen el ruido necesario para la publicidad de este evento. A la vez se han implementado estrategias de difusión para que esta convocatoria y los textos resultantes de este premio encuentren con dificultad al lector. Para complementar la desinformación de esta convocatoria se ha establecido una página de internet donde los interesados no podrán encontrar textos sobre crítica de arte y
ensayo.

El Premio Nacional de Crítica de Arte está cerrado a pensadores provenientes de todo tipo de disciplinas que tengan interés en escribir un formato distinto al ensayo, una reflexión sobre el arte contemporáneo en Colombia.
critica.org

* El ensayo. Entre el tedio y el orden. Jaime Alberto Vélez, Taurus,
Bogotá, 1933. Página 2589.
** ibid. p. 3902.