La protesta está en boga. Movimientos y agitaciones por todo el mundo en el ultimo par de años se reflejan en el mundo del arte. Este informe del magazine cultural Alemán “Cultura.21“ hace una investigación sobre 3 ejemplos concretos, la música de protesta contemporánea, el teatro combativo de Bielorrusia y la Bienal Berlinesa de este año. ¿Pero puede el arte cambiar el mundo realmente? Conoceremos a artistas que se ven a sí mismos como activistas.
Se inauguró esta semana una controversial Bienal en la ciudad de Berlin. La curaduría, a cargo del artista Polaco Artur Zmijewski quien nos explica su criterio: ”El concepto de la 7 ª Bienal de Berlín es muy sencillo y se puede condensar en una sola frase: Arte actual que realmente funciona, que deja su huella en la realidad, y abre un espacio donde la política se puede realizar. Estas obras crean acontecimientos políticos, ya sea ocupandose de los problemas urgentes de la sociedad o la política de la memoria a largo plazo. Las áreas clave de nuestro interés son: la eficacia política del arte, la actividad de los intelectuales comprometidos y la clase creativa (artistas, en particular), y sus reacciones a las importantes cuestiones sociales.”
Para tal ocasión han apostado por crear una plaza pública dentro de la Bienal, al más puro estilo #15M y#occupy, es decir, un espacio público de discusión abierta, en este caso una plaza global. Una plaza global porque participará todas las gentes y asambleas que quieran de los diferentes países , con la idea de intercambiar experiencias y pensar estrategias. Ante este espacio, que por lo oficial, por lo que implica ser un emblema en el mercado del arte, surgen dudas, desconfianzas de parte de los manifestantes implicados, ¿se convertirá el #15M en un objeto de arte?
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publicado por lalulula.tv
3 comentarios
Creo que todos los que se preguntan si el arte puede o no cambiar el mundo, dan por supuesto que el arte no es de este mundo sino de no se sabe que mundo. Si asumimos que el arte es parte del mundo, cambiar el arte es también cambiar el mundo, del cual es una parte indisoluble.
Sin arte, solo vivo biológicamente, ¿que si es útil?, la respuesta para mi es que sí: una poesía, una composición de música, una escena de danza, logran impedir que me suicide; ahora, al embarcarme en crear una obra da sentido a mi vida y como mínimo me otorgan algo de libertad, de una libertad que nada más puede darme. En el nivel más basico, me da trabajo. Esto hace la diferencia entre lo que es vital y lo que me es prescindible. Entonces, imagino que no siendo un ser extraño al mundo, deben existir muchas personas conmigo a las cuales les ocurre algo parecido; así, el arte cambia el mundo, empezando por nuestro mundo individual, que es la única manera de sentirlo; pues me es imposible sentir el mismo mundo que otro percibe.
El arte es inherente en mi existencia, la única manera de ser, la felicidad del trabajo disfrutado, de la creación continua, la posibilidad infinita de expresar nuestros sentimientos estéticamente sobre lo que nos toca o nos duele, nos aterra o nos fascina. Claro que nos permite aportar al cambio, acaso una imagen, triste de la niña quemada con napalm corriendo desnuda en Vietnam, no fue la alarma que paró la guerra? gracias a Dios es posible trasmitir nuestra mirada por medio de la expresión mas pura, el arte.