arte: hacia una noción Erostrática de la política

"Hoy en dia estamos tratando de expandir el conocimiento en todas direcciones.
¿Quien sabe si en los siglos por venir no habra universidades con la misión de
reestablecer nuestra antigua ignorancia?

Georg Christoph Lichtenberg (1742-1799).

"Según la leyenda, Eróstrato incendió el templo de Diana, en Éfeso, para pasar a la posteridad, ya que no tenía ningún mérito para conseguir fama. Forma peculiar el complejo de inferioridad de gran incidencia criminógena. No importan los medios con tal de distinguirse, sobresalir, que se hable de uno. Declaración frecuente en los cuarteles de policía :"Lo hice porque quería salir en los medios". Haebig, el asesino de la calle Dardignac, ejemplifica el complejo."

Diccionario Apocatasásis de Complejos


El artista costarricense Guillermo Vargas, Habacuc, ha creado una polémica, astutamente calculada de seguro, por la exhibición de un perro callejero al que mantuvo amarrado sin agua ni comida hasta la muerte como parte de una instalación en Managua.

Habacuc, seleccionado para la Bienal Centroamericana Honduras 2008 y subitamente conocido en USA. Inglaterra e incluso en Noruega e Islandia, dijo a la prensa que "su obra fue un homenaje a Natividad Canda, nicaragüense que murió tras ser atacado por dos perros rottweiler en un taller en Cartago."

Es muy posible que debido a la lamentable formación político/humanística que pudo haber recibido Vargas en alguna Facultad de Bellas Artes de Centroamérica, – en la cual no se tendría noticia del texto "La educación es un asunto estrictamente político" de Marina Grzinic,-   el trasfondo político de su obra parecería haber sido extraído del  Recurso No 3  del "Manual de Conceptos Políticos Simples y Sentimentales para Artistas" de Amma Moron y que es el tan abusado " Homenaje in memoriam".

Si el artista hubiera tenido acceso a las politizadas facultades de Artes colombianas o españolas, – cada vez más cercanas al Proletkult bolchevique y al Partido de la Hegemonía Cultural de Gramsci y de las cuales dependerán dentro del próximo Plan Cultural Quinquenal  las facultades de Ciencias Politicas. Sociología y Derecho – muy seguramente habría tenido acceso a los más altos niveles del "Discurso Justificativo Permutativo de No importa Que Quiero Volver Prestigio de Mercado".

 Tendría allí, entre muchas otras, acceso a las  nociones más útiles, complejas y contemplativas de la " actitud pasiva ( aunque dolorosa) frente al espectáculo de la muerte del Otro" de Heidegger y Lévinas a las que, – cambiandoles palabras incomprensibles como "dassein" en Heideger y "el otro" en Lévinas por la palabra "perro", – lograría ante todo una glorificación del ser abusado por el artista y un lavado de manos pomposo frente a lo que sin la ayuda de éstos célebrés filósofos europeos sería una vulgar ejecución  y sobre todo obtendría la defensa de profesores, curadores y críticos frente a los ataques de los defensores de animales (www.petitiononline.com/13031953/petition.html) y lo catapultaría al Mercado filocrítico anglosajón en un lapso más que breve,  sin tener que traspasar los escollos morales en los que, por su incipiente escolaridad, se encuentra encallado en éstos momentos:

Heidegger:

"Nadie puede tomarle al perro su morir
[…]. El morir debe asumirlo cada perro por sí mismo. La muerte, en la medida en que ella "es", es por esencia cada vez la mía. Es decir, ella significa una peculiar posibilidad de ser, en la que está en juego simplemente el ser que es, en cada caso, propio del perro. En el morir se echa de ver que la muerte se constituye ontológicamente por medio del ser-cada-vez-mío y de la existencia"

Lévinas:

La simpatía y la compasión, sentir dolor por el perro o «morir mil muertes» por el perro tienen, como condición de posibilidad, una sustitución más radical de los demás. Una responsabilidad hacia el perro que consiste en soportar su desgracia o su fin como si se fuera culpable. Es la posibilidad definitiva: sobrevivir como culpable […]. Mi muerte es mi participación en la muerte de los demás perros, y en mi muerte muero esa muerte que es culpa mía.


Habacuc en Galería Códice, agosto 16 de 2007.

http://www.marcaacme.com/blogs/analog/index.php/2007/08/22/5_piezas_de_habacuc

13 comentarios

Dicotomías entre Arte y Moral

El arte contemporáneo es resultado de un proceso evolutivo de larga tradición artística y me genera muchas preguntas y reflexiones que me gustaría compartir con ustedes. Con el Renacimiento se hace evidente una diferencia entre la imagen o el espacio devocional que servía, en una primera instancia, para comunicarse con Dios a través de la expresión que exaltaba el disegno del desnudo de Cristo paganizado en un fresco de la Capilla Sixtina.

El arte humanista, por tanto, se empieza a ver como portador de formas, puntos y composición independientemente de su vínculo con lo divino, es decir, se convierte en una mercancía bella, y por supuesto, burguesa de origen europeo. ¿Es en este momento donde se institucionaliza el arte amoral?, es decir alejado de los valores sociales y culturales predominantes, basado en un gusto neoplatónico elitista de un lider espiritual embelezado por los textos clásico, sin censuras sin ataduras de la doble moral cristiana.

Recuerdo también, el movimiento romántico que manda al carajo a los príncipes, reyes y papas para someterse valientemente a sí mismo convirtiendo la producción artística en arte por el arte. Asimismo, Foucault explica que los discursos legitimados en relación al poder….tienen que ser dichos por ciertas personas, en ciertos contextos y en cierto tiempo. ¿Por qué Habacuc hace esa obra en la periférica Nicaragua y no en New York en una galería de Soho?. En este sentido, esa finalidad de ver el arte cada vez más separado de los otros ordenes sociales como la política y la moral ha sido una tendencia muy valorada por el sistema de pensamiento de la modernidad y principalmente las instituciones legitimadoras que estiman la exploración, la creatividad y los medios alternativos para calificar la genialidad y el aura de un artista. Desde los Salones Nacionales Franceses del siglo XIX donde la crítica empieza a ser eje de prácticas estéticas y las colecciones de los palacios, los cuales abren sus puertas a la recepción democrática, se han condicionado la creación fuera de la moral como bien se planteó en la primeras vanguardias del siglo pasado.

Las revoluciones han sido creadas por burgueses y la definición de arte tal y como lo entendemos ahora se le dió una función de independencia ya que el pensamiento positivista implicó la renuncia del mito para asumir una posición logocentrista, estimada en los centros culturales. La moral, a la luz de la modernidad que fragmenta el mundo pero nunca lo une, nada tiene que ver con la política y la religión, de ahí, la máxima de Maquiavelo el fin justifica los medios aludiendo a la necesidad apologética de crear estados nacionales. Entonces, ¿El arte en occidente puede ser laico y amoral ya que es independiente?, y me pregunto de nuevo ¿Esa emancipación es altamente cotizada en el mercado y las ferias de Miami ayudan a poner el precio al comprador?. Recuerdo la codiciada mierda de artista propuesta por Piero Manzini que fue comprada inmediatamente por un reconocido coleccionista quien pagó en oro su peso, o el animal disecado de Rauchemberg en Manhattan, o las ocurrencias del excremento de elefante en una de las célebres bienales en Venecia en la década de lo noventa…..o el médico-artista que plastigena performáticamente cadáveres de animal y de humanos para generar esa separación morbosa entre Arte, Moral y Espectáculo. Entonces, me pregunto si a la luz del Sistema del Arte autónomo, lo que hizo Habacuc ¿es arte o asesinato?. Reflexiono de nuevo y con insistencia sobre la obra de Marcel Duchamp, muy célebre por cierto; el famoso orinal que negaba la técnica por el concepto, que trataba de integrar la vida al arte, ¿Estaba este creador autónomo haciendo un favor a la anquilosada academia francesa, al aportar novedad y el progreso lineal?. Esa era una acción anti-estética pero moralmente neutral si la contrastamos con los espacios extraestéticos, pero si ubicamos un pobre ser vivo moribundo en una galería que tuvo mala suerte de morir en ese mismo instante, de sacrificarse en nombre del Arte de la alta cultura periférica centroamericana. Entonces, me pregunto finalmente: ¿Ese acto moral o amoral resulta consecuente con el sistema heredado de las metrópolis con sus museos y ferias lujosas de primer mundo que exaltan la novedad por la novedad?

Rodolfo Rojas Rocha

respeto
October 24th, 2007

Queridos amigos,

Transcribo un artículo firmado por Rosa Montero que apareció en El País el 16 de Octubre. A continuación el link en el que se pide la firma para protestar por este hecho e impedir que ese artista represente su país en la bienal Centroamericana de Honduras.

artículo >

Respeto

Guillermo Vargas Habacuc es un costarricense que dice ser artista. En agosto hizo una exposición en una galería de Managua y tras atar un perro a una pared, lo dejó morir de hambre. Según él, esa sádica, bárbara y necia obviedad era una manifestación artística. En internet pueden verse fotos estremecedoras del pobre animal. La noticia ha llegado ahora hasta a mis manos, empujada por una campaña internacional de recogida de firmas para evitar que ese matarife acuda en 2008 a la Bienal Centroamericana de Honduras ( puedes firmar en http://www.petitiononline.com/13031953/). El repugnante montaje de Habacuc reabre la cuestión de los límites del arte, o cómo bajo la excusa del hecho artístico se pueden cometer todo tipo de tropelías que en realidad solo buscan llamar la atención y solo son puro narcisismo patológico. Hace dos años una exposición el el Reina Sofía de Madrid incluyó un video de 53 minutos en donde se veía matar a martillazos a una vaca; y lo peor fue que el Consejo de Críticos de Artes Audiovisuales sacó un comunicado en defensa de ³la libertad creativa². Qué triste que, justamente aquellos que deberían estar reflexionando sobre el arte, sobre su sentido y sus fronteras morales, prefirieran abdicar del pensamiento y cultivar el corporativismo y el lugar común. Pero que demonios es la libertad creativa? ¿Les parecerá creativo matar de hambre a un perro? Y entonces, ¿por qué no hacer de arte de atormentar un niño, por ejemplo? Aterrorizar a un crío durante horas, ¿no revelaría muy creativamente el sustrato referencial del miedo arquetípico y otras mentecateces semejantes¹ El caso de Habacuc roza una cuestión aún mas esencial, una de las fronteras de la civilidad del siglo XXI: la comprensión de nuestra continuidad orgánica con el resto de los animales, y la certidumbre de que no seremos capaces de respetarnos a nosotros mismos si no respetamos a los demás seres vivos (igual que tras la revolución francesa, hubo que aprender que la libertad del hombre sólo se podía conseguir si también englobaba a la mujer). Pasado mañana, Los Verdes españoles organizarán una jornada parlamentaria en apoyo de la postergada Ley Nacional de Protección Animal. Necesitamos esa ley, por los animales y por nosotros.

Rosa Montero

http://www.petitiononline.com/13031953/petititon.html

Luz Ángela Lizarazo

«Estos valientes hombres, Neil Armstrog y Edwin Aldrin,
saben que para ellos no hay esperanza de rescate.
Pero saben también que en su sacrificio
hay una esperanza para la humanidad».

Estracto del discurso que Richard Nixon tenía preparado para ser leído en la eventualidad
de que Armstrong y Aldrin hubieran muerto en la Luna en 1969

**********

Lecciones de urbanidad

por

El Perro 1970

*******

Cultive buenas maneras
para sus malos ejemplos
si no quiere que sus pares
le señalen con el dedo.

Cubra sus bajos instintos
con una piel de cordero.
El hábito no hace al monje
pero da el pego.

Muéstrese en público cordial,
atento, considerado,
cortés, cumplido, educado,
solícito y servicial.

Y cuando la cague, haga el favor
de engalanar la boñiga.
Que, admirado, el mundo diga
«¡Que lindo caga el señor!»

Hágame caso y tome ya
lecciones de urbanidad.

Tenga a mano una sonrisa
cuando atice el varapalo.
Reparta malas noticias
envueltas para regalo.

Dígale al mundo con flores
que va a arrasar el planeta.
Firme sentencias de muerte
pero con buena letra.

Ponga un testigo a Dios
y mienta convincentemente.
Haga formar a la gente
pero sin alzar la voz.

Que a simple vista no se ve
el charol de sus entrañas.
Las apariencias engañan
en beneficio de usted.

Hhágame caso y tome ya
lecciones de urbanidad.

Cultive buenas maneras
donde esconder sus pecados.
Vista su mona de seda
y compruebe el resultado.

Que usted ser lo que sea
-escoria de los mortales-
un perfecto desalmado,
pero con buenos modales.

Insulte con educación,
robe delicadamente
asesine limpiamente
y time con distinción.

Calumnie pero sin faltar
traicione con elegancia
perfume su repugnancia
con exquisita urbanidad.

********

http://elperro1970.wordpress.com/2007/10/18/manual-d-supervivencia-perro-cinico/

Enviado a Esfera Pública por Carlos Salazar –

A mi personalmente me gusta la obra «Exposición #1» de Guillermo Vargas «Habacuc». Cuenta el rumor, ya notablemente expandido en Internet, que dejó morir de hambre a un perro callejero en una galería. Y digo que me gusta, por las siguientes razones:

1.) La obra se ha expandido como un teléfono roto, en el que cada vez se van agregando datos. Ahora hay hasta una petición para boicotear la participación de Habacuc en la Bienal Centroamericana Honduras 2008. Pero la noticia sólo se ha reseñado en dos lugares, los demás han sido recopilaciones de las mismas. El primero (http://www.nacion.com/ln_ee/2007/octubre/04/aldea1263590.html) aclara que el artista siembra la duda al declarar:

«Me reservo decir si es cierto o no que el perro murió. Lo importante para mí era la hipocresía de la gente: un animal así se convierte en foco de atención cuando lo pongo en un lugar blanco donde la gente va a ver arte pero no cuando está en la calle muerto de hambre. Igual pasó con Natividad Canda, la gente se sensibilizó con él hasta que se lo comieron los perros», explicó .

Incluso agregó: «Nadie llegó a liberar al perro ni le dio comida o llamó a la policía. Nadie hizo nada».

Al ser cuestionado acerca de si alimentó al animal o no, el artista se negó a responder.

El segundo lugar donde aparece la primera referencia a la muerte del animal es (http://www.marcaacme.com/blogs/analog/index.php/2007/08/22/5_piezas_de_habacuc ) :

«Según supe el perro murió al día siguiente por falta de comida.»

De resto, no hay más referencias directas, no hay fotos del animal muerto, ni ninguna otra alusión. Pero resulta que marcaacme es una página montada por los propios amigos de Habacuc, según consta en http://www.myspace.com/casitadetentaciones , que es la propia web page de Habacuc. La página de hecho, ya había sido cerrada y al momento sólo figura marcaacme como amigos de Habacuc. Incluso, en el blog de marcaacme salen los propios comentarios de Habacuc, sembrando la polémica al respecto.

2.) Las declaraciones de Habacuc y quienes alimentan la polémica están llenas de incosistencias como por ejemplo la edad ( en algunos lados dicen que tiene 32 años y con una trayectoria seria (http://transitiomx.net/edicion2007/artistas/habacuc ), y en otros que el mismo artista dice tener 50 años:

«Hello everyone. My name is Guillermo Habacuc Vargas. I am 50 years old and an artist. Recently, I have been critisized for my work titled «Eres lo que lees», which features a dog named Nativity. The purpose of the work was not to cause any type of infliction on the poor, innocent creature, but rather to illustrate a point. In my home city of San Jose, Costa Rica, tens of thousands of stray dogs starve and die of illness each year in the streets and no one pays them a second thought. Now, if you publicly display one of these starving creatures, such as the case with Nativity, it creates a backlash that brings out a big of hypocrisy in all of us. Nativity was a very sick creature and would have died in the streets anyway.» (http://ea6gk.blogspot.com/2007/10/la-chulera-y-prepotencia-de-una-mente.html )

Además se dice que ha sacrificado una vaca a martillazos en una exposición en un video de 53 minutos (video del que solo se dice que existe y que fue en el Reina Sofía de Madrid – y no se reseña en ninguna fuente verificable)

3.) La propia galería donde se presentó la obra ha sacado el siguiente comunicado (http://ea6gk.blogspot.com/2007/10/aclaracion-de-galeria-codice.html ):

ACLARACION DE GALERIA CODICE

Managua, 19 de octubre

Galería Códice desde su creación en 1991, ha promovido las artes visuales centroamericanas, pero especialmente las nicaragüenses, tanto en el nivel nacional, como en el regional e internacional. En Códice han expuesto grandes maestros centroamericanos, así como artistas consolidados y emergentes. Los lenguajes contemporáneos del arte universal también han tenido espacio en Códice, por lo que periódicamente acoge muestras de arte conceptual.

Con ese espíritu, el jueves 16 de agosto recién pasado se presentó Exposición No.1, del artista costarricense, Guillermo Vargas, conocido artísticamente como HABACUC.

Uno de los trabajos expuestos consistió en presentar a un perro famélico que Habacuc recogió de la calle, y durante la exposición aparecía amarrado con una cuerda de nylon, que a su vez estaba sujeta a otra cuerda que pendía de dos clavos en una esquina de la Galería. Habucuc nombró al perro «Natividad» en homenaje al nicaragüense Natividad Canda (24 años) quien murió devorado por dos perros Rottweiler en un taller de San José, Costa Rica, la madrugada del jueves 10 de noviembre de 2005.

El perro permaneció en el local tres días, a partir de las 5 de la tarde del miércoles 15 de agosto. Estuvo suelto todo el tiempo en el patio interior, excepto las 3 horas que duró la muestra, fue alimentado regularmente con comida de perro que el mismo Habucuc trajo. Sorpresivamente, al amanecer del viernes 17, el perro se escapó pasando por las verjas de hierro de la entrada principal del inmueble, mientras el vigilante nocturno quien acababa de alimentarlo limpiaba la acera exterior del mismo.

La Galería Códice se reserva el derecho de velar por la calidad de los trabajos expuestos, respetando en todo momento la creatividad del artista y jamás ha pretendido ejercer ningún tipo de censura, siempre y cuando no atenten contra los principios elementales de la ética y mucho menos que impliquen la vida de un ser viviente, sea humano o animal. Yo pensaba quedarme con «Natividad», pero él prefirió retornar a su propio habitat.

Celebro el que tantas personas en el nivel internacional se hayan mostrado molestas por las declaraciones brindadas por Habacuc, en las que sostenía que su intención era dejar morir al perro de inanición, lo que es de su absoluta responsabilidad. Al cumplir con informar la verdad de los hechos, espero que todas esas mismas personas hayan elevado también su voz de repudio cuando Natividad Canda fue devorado por los Rottweiler.

Atentamente,
Juanita Bermúdez
Directora
Galería Códice
Managua, Nicaragua
4.) La exposición se ha dado finalmente en Internet, en comentarios y blogs, para finalmente ser consecuente con el slogan de la exposición «Eres lo que lees»
Personalmente creo que sin necesidad de que el animal haya muerto cumple con su señalamiento. En ese aspecto me parece completa. Y creo que finalmente los que dan por muerto al perro son los lectores. Serán los lectores los asesinos del animal?

Sobre Natividad.

La obra no pasa de ser un gesto amarillista que ha ganado mas trascendencia de la que se merecía con los rumores que ha generado (y que el artista se ha encargado de alentar).

No es necesario someter a un animal enfermo a los caprichos de un artista para probar que los humanos son impasibles ante el dolor del otro, ese hecho se prueba solo todos los días cada vez que nos sentamos ante un noticiero, cada vez que pasamos frente a una familia de indígenas descalzos en el centro de la ciudad, cada vez que una multitud grita «Ole» en una plaza de toros, cada vez que vemos a un caballo flaco y enfermo sometido a tirar de una carreta y obviamente ante los casos de los «Natividades».

El problema ético no es si el animal murió o no (como tampoco lo es en una corrida de toros), el problema es que los artistas se crean con el derecho de explotar animales sin límites éticos hasta el punto de aceptar que se explote a un perro evidentemente enfermo para probar una tesis.

El artista sometió a un perro enfermo a sus caprichos sin tener en cuenta las necesidades del animal. Se menciona como justificación que no lo dejo morir de hambre (esto alivia un poco a quienes nos preocupamos por este rumor), sinembargo lo encerró varios días y lo amarró durante 3 horas sin agua ni comida sobre un piso de cemento. Quien ha estado cerca de un perro sabe que los perros son animales capaces de sentir sufrir física y psicológicamente, el perro evidentemente no estaba contento por eso se escapó apenas pudo.

El artista pretende que no le demos trascendencia al daño que el hizo a Natividad-perro sino al daño que hicieron quienes observaron a Natividad-humano morir, como si el daño de su acto se anulara porque «existen peores males», es la misma lógica -por ejemplo- de quienes justifican el secuestro por que existe la injusticia social.

Mejor que no lo boicoteen así no ganaría más reconocimiento del que ya ha ganado.

No hay mártir mas escandaloso que un artista llorando por censura.

M

Moralina: la dama del perrito

En un concurso de belleza le hicieron una pregunta hipotética a una candidata a reina: “¿Si usted tuviera una colección de arte y un perro french poodle, y su casa estuviera en llamas, qué salvaría, las obras o al perro?. La reina con gran seguridad respondió: “Al perro”. “¿Por qué?” preguntó el presentador. “Porque él también es un ser humano” respondió la candidata.

Lucas Ospina

La señorita tiene razón en la intención de su frase, aunque su nivel de educación y me imagino quer su nerviosismo no le permitieron expesarse de manera verbal correctamente.

Ella quería decir «porque al igual que un ser humano es un mamífero con capacidad de sentir dolor «.

Este ejemplo parece implicar que:
la señorita es tonta y siente compasión por los perros, luego quienes compadecemos a los perro somos tontos.

La torpeza de la respuesta de la señorita no implica que quienes sentimos compasión y respeto por los perros tengamos el mismo coeficiente intelectual que la señorita…

Podría ponerse como ejemplo la frase de algun defensor de perros mas intelectual como Fernando Vallejo por ejemplo. (lo cual tampoco implicaría que quienes sentimos compasión y respeto por los perros ) seámos buenos escritores.

M

Si se quiere hacer un silogismo entre tonta y compasión, o entre ilustración y crueldad, M, como interprete, está en su derecho; pero el asunto es más sencillo (más no simple): la reina, como lo repite M, tiene la razón, pero lo tiene porque actúa, sea arte o no —¿por qué nadie del público soltó al perro en la galería?.

«Mientras más conozco a los hombres más quiero a mi perro» dicen que decía Schopenhauer*.

Lucas Ospina

*Schopenhauer puede ser un buen nombre para un perro, como lo es «Lucas»

Lucas

lo que pasó fué que Interpreté mal… no es que yo quisiera hacer ese silogismo, fue que entendí mal lo que ud quería decir, debe ser la paranoia del defensor de animales.

M

*Reinita puede ser un buen nombre para M

El artículo no dice en ningún momento que el autor del video de 53 minutos en el Reina Sofía sea obra de Habacuc.
Esta obra pertenece al artista Jordi Benito y es una obra de los 70.

Luz Angela Lizarazo

Un perro es un animal, tiene un espiritu de animal, un sentimiento de animal y una conciencia de animal. Una persona tiene todos los equivalentes propios.
En los humanos la crueldad, es una más de sus componentes de interrelación.
En este caso, el artista la usa (¿puede negarlo..?), se entiende -esto es pura interpretación-, con el objeto, eso sí: ¿de qué..?

..Si una reflexión es lo buscado, y con ello, elevarnos sobre el uso de este carácter cruel, no muestra que la intención sea superior al deseo de exhibición; (bien podría haberlo hecho de forma virtual, hay tantas posibilidades..menos morbosas)

Por esto, interpreto: el artista desea satisfacer su necesidad de imagen a toda costa y es capaz de apelar a la crueldad para conseguirlo. Tiene miedo de no ser famoso, y el miedo es un carácter muy animal, y en ningún momento consigue elevarse por encima del instito de crueldad.

Esto, aunque no pretende ser silogismo, no es descabellado: el nivel del artista no está muy lejano del animal utilizado; en cuanto a sentimiento se refiere (y en lo privado, le concedo una superioridad a la mascota: seguro aceptó ser SU mascota).

Se ha visto ya mucho de la depravación en el arte.

El asunto con relación a la reina, nos puede también mostrar; que es, -muy tristemente-, la única aristocracia abierta con la que contamos (…) Las obras de arte hipotéticas, han quedado sin duda intactas aunque hayan sido destruidos sus objetos (hipotéticamente); un perro, dejará de existir aunque no sea salvado. La reina, es tonta según se infiere por su juicio, no parecería ser cruel; pero sin lugar a dudas su intelecto y espiritualidad, no pueden ser tomados por supremos, por tanto su «juicio» carecería de relevancia, de trascendencia.

Una real aristocracia (supremacía espiritual no heredada), es lo único que puede elevarnos de una postración intelectual y espiritual; no únicamente en este par de casos.

Aclaración tema «Hababuc»
Desde hace días circulan por Internet y en algunos órganos de la prensa escrita, versiones que vinculan al jurado de la Bienal de Costa Rica Bienarte 2007 (Ana Sokoloff, Olivier Debroise y Rodolfo Kronfle Chambers) con una exposición que el artista Guillermo Vargas Crealizó en la galería Códice de Managua, Nicaragua, en agosto de 2007.

Como miembros del jurado queremos dejar establecido que las obras que Guillermo Vargas “Habacuc” envió a la Bienarte 2007 eran entonces, como lo estipula la convocatoria de esta bienal, inéditas, y por lo tanto, sin relación alguna con las que, dos meses antes, fueron expuestas en Managua.

Suscribimos la declaración del Museo de Arte y Diseño Contemporáneo de San José, Costa Rica (MADC), publicado el pasado 18 de octubre, la cual adjuntamos junto a una aclaración de la directora de la Galería Códice en Nicaragua.

Finalmente, es nuestra obligación rechazar de la manera más firme la campaña mediática que se ha orquestado, pretendiendo descalificar y amedrentar, manipulando la información y promoviendo intereses oscuros, de corte fascista, incluyendo un llamado a la violencia y al crimen.

Los miembros del jurado de Bienarte 2007

Ana Sokoloff Olivier Debroise Rodolfo Kronfle Chambers

Nueva York, Ciudad de México, Guayaquil, 28 de octubre de 2007.

DEL MADC DE COSTA RICA
A QUIEN INTERESE

En atención a todos los correos que hemos recibido solicitando la derogación de la participación del artista Guillermo Vargas (Habacuc) en la Bienal Centroamericana Honduras 2008, el Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC) de Costa Rica aclara:

1. El MADC no tiene injerencia en la representación de Costa Rica en la Bienal Centroamericana Honduras 2008. El papel de este museo ha sido el de promotor de la Bienal Costarricense de Artes Visuales, actuando como facilitador y sede de la selección de obras realizada por un jurado internacional.

2. La muestra de la Bienal Costarricense de Artes Visuales 2007 que actualmente se expone en las salas del museo, comprende dos obras de Habacuc, concretamente, “Jony leyendo y explicando” y “Pancartas”. La obra en la que Habacuc involucró un perro, y por la que está siendo cuestionado internacionalmente, se realizó en agosto de 2007 en la Galería Códice, de Managua (Nicaragua). Esa obra no participó ni forma parte de la selección de obras de la bienal, por lo tanto no está vinculada a la Bienal Costarricense de Artes Visuales 2007 ni a la Bienal Centroamericana de Honduras 2008.

3. Por otro lado, con independencia de los cuestionamientos éticos y/o estéticos que se puedan hallar en una obra como la realizada por el artista Guillermo Vargas, (Habacuc) en Nicaragua, desde el MADC consideramos:

Que una obra cuestionable o cuestionada, debe servir para dar lugar a la expresión de opiniones diferentes y hasta encontradas, pero nunca a actos de censura.

Que la censura de una obra o artista por el tema o la forma en que se aborda, es una medida impositiva que evade la interrogación misma sobre lo que se pretende cuestionar o anular.

Que aplicar este tipo de medida implicaría que la organización de la Bienal Centroamericana Honduras 2008 asuma la posición de juez, y aplique un “castigo” a un artista a partir de una demanda, pasando por encima de la decisión que un prestigioso jurado tomó de incluir a este artista como parte de la representación de Costa Rica en el momento y lugar apropiado (la Bienal Costarricense de Artes Visuales 2007).

Por lo tanto, que la solicitud de derogación de la participación de Guillermo Vargas (Habacuc) de la Bienal Centroamericana de Honduras 2008, consideramos es legalmente improcedente y sin fundamento, no solo porque las obras con las que el artista fue seleccionado a la Bienarte 2007 son distintas a la obra cuestionada, sino porque la censura de un artista por hacer una obra muy polémica -aunque este sujeta a discusión dentro de los ámbitos de la estética y la ética- no debe ser de ningún modo la base de legitimación de la censura.

ACLARACION DE GALERIA CODICE
Managua, 19 de octubre

Galería Códice desde su creación en 1991, ha promovido las artes visuales centroamericanas, pero especialmente las nicaragüenses, tanto en el nivel nacional, como en el regional e internacional. En Códice han expuesto grandes maestros centroamericanos, así como artistas consolidados y emergentes. Los lenguajes contemporáneos del arte universal también han tenido espacio en Códice, por lo que periódicamente acoge muestras de arte conceptual.

Con ese espíritu, el jueves 16 de agosto recién pasado se presentó Exposición No.1, del artista costarricense, Guillermo Vargas, conocido artísticamente como HABACUC.

Uno de los trabajos expuestos consistió en presentar a un perro famélico que Habacuc recogió de la calle, y durante la exposición aparecía amarrado con una cuerda de nylon, que a su vez estaba sujeta a otra cuerda que pendía de dos clavos en una esquina de la Galería. Habucuc nombró al perro “Natividad” en homenaje al nicaragüense Natividad Canda (24 años) quien murió devorado por dos perros Rottweiler en un taller de San José, Costa Rica, la madrugada del jueves 10 de noviembre de 2005.

El perro permaneció en el local tres días, a partir de las 5 de la tarde del miércoles 15 de agosto. Estuvo suelto todo el tiempo en el patio interior, excepto las 3 horas que duró la muestra, fue alimentado regularmente con comida de perro que el mismo Habucuc trajo. Sorpresivamente, al amanecer del viernes 17, el perro se escapó pasando por las verjas de hierro de la entrada principal del inmueble, mientras el vigilante nocturno quien acababa de alimentarlo limpiaba la acera exterior del mismo.

La Galería Códice se reserva el derecho de velar por la calidad de los trabajos expuestos, respetando en todo momento la creatividad del artista y jamás ha pretendido ejercer ningún tipo de censura, siempre y cuando no atenten contra los principios elementales de la ética y mucho menos que impliquen la vida de un ser viviente, sea humano o animal. Yo pensaba quedarme con “Natividad”, pero él prefirió retornar a su propio habitat.

Celebro el que tantas personas en el nivel internacional se hayan mostrado molestas por las declaraciones brindadas por Habacuc, en las que sostenía que su intención era dejar morir al perro de inanición, lo que es de su absoluta responsabilidad. Al cumplir con informar la verdad de los hechos, espero que todas esas mismas personas hayan elevado también su voz de repudio cuando Natividad Canda fue devorado por los Rottweiler.

Atentamente,

Juanita Bermúdez
Directora
Galería Códice
Managua, Nicaragua

Más madera, esto es la guerra del escándalo «artístico». Tras la polémica de la fotografía de Nam Goldin de las niñas desnudas ahora tenemos el más difícil todavía, esto es, la manifestación de la crueldad «estetizada». El artista costarricense Guillermo Vargas ha dejado morir de hambre a un perro callejero en una instalación que ha montado en una feria de arte en Nicaragua. En una pared ha escrito, con comida de perro, la frase «Eres lo que lees», añadiendo acciones sonora y olfativa o, mejor, narcóticas, que convierten su pieza en el colmo de lo caótico. Así puede escucharse el himno sandinista al revés y asistir a la quema, en un incensario de 175 piedras de crack y una onza de marihuana. No contento con ese cóctel, el artista conocido con el sobrenombre de «Habauc» atrapó un perro en un barrio marginal de Managua y lo ató a una de las paredes de su demencial montaje. Al día siguiente el animal había fallecido.

Homenaje a Natividad Canda

Haciendo frente a la indignación generalizada y a las críticas, el responsable de esta lamentable acción ha venido a decir que su intención es ir contra la hipocresía social. Entre sus confusas intenciones estaba la de homenajear a Natividad Canda, que fue atacado en Cartago (Nicaragua) por unos perros rottweiler. «La gente -subraya Vargas- no se sensibilizó con ese hombre hasta que se lo comieron los perros», añadiendo que tampoco nadie tomó la decisión de alimentar al perro que él estaba «exponiendo», colaborando de esa manera a su muerte. Como es lógico, las asociaciones de defensores de los animales han descalificado esta pretendida obra de arte.

Es realmente sorprendente la proliferación de acciones artísticas que se caracterizan por su violencia como si confiaran en la magia homeopática. Pero no es cierto que en todas las circunstancias «lo semejante con lo semejante se cure». Los contemporáneos sufrimos el «síndrome de Medusa», estamos, literalmente, estupefactos ante la pantalla contemplando toda clase de horrores sin que ni nuestras conciencias ni nuestros estómagos reaccionen. Algunos artistas, convertidos en unos aprendices de mago, profesionales del exorcismo pachanguero, deciden presentar a lo que todavía, inercialmente, llaman «mirada burguesa», cosas repugnantes o sencillamente delictivas. Sus provocaciones encuentran la respuesta convencional: la apatía o la vergüenza ajena.

La brutal «obra» de Guillermo Vargas nos lleva a pensar de nuevo en el sinsentido del arte contemporáneo. Obsesionado por el tabú, esto es, entregado al delirio de tocar y profanar lo que sea, no repara en gastos y gestos. Todas las gesticulaciones, solidarias con la empanada del reality-show, terminan por llevarnos a pensar que sería necesario recuperar la capacidad crítica o, por lo menos, aceptar que, en ciertas ocasiones, tenemos razones para la indignación. Porque el arte no puede ser el paraguas para el vandalismo y, consecuentemente, no tendría que garantizar la impunidad. Chris Burden disparó contra un avión al borde de un aeropuerto, Santiago Sierra llenó una sinagoga en Alemania de gases irrespirables, Teresa Margolles genera vapor con el agua que sirve para limpiar los cadáveres. En alguna ocasión he calificado a estas formas artísticas contemporáneas recurriendo al término «idiota». Y resulta que en vez de dejarnos estupefactos o hacernos pensar, el «realismo cruel» en el que se instala Guillermo Vargas revela más que la idiotez el cumplimiento cínico de la estetización contemporánea. No hay en esa obscena exhibición de atrocidades otra cosa que búsqueda de impacto mediático. Parece ser que este joven artista que se columpia entre la perogrullada y la política de la denuncia estaba invitado a la próxima Bienal Centroamericana. Su estilística era típicamente «bienalista»; tenía todos los elementos de la salsa de moda: un poco de sociología blanda, una tajada de retórica multicultural y algo escabrosa para que se pueda calificar el potaje indigesto como «radical». Rilke encontró en los ojos de una perrita abandonada en su peregrinaje español una interrogación metafísica, algo así como la indicación de una solidaridad melancólica. Seguramente, Guillermo Vargas no ha leído aquellos versos rilkeanos en los que convoca a los perros que nos ven pasar «por un mundo interpretado». Él, con toda su rabia decorativa, no necesita la poesía: le basta con la brutalidad y ser así, faltándole tanto que leer, un analfabeto bestial. Su provocación es, sencillamente, repugnante.

fernando castro flórez